Vinyasa Yoga: Moviliza tu cuerpo en armonía con tu Respiración

Por Josefina @yomo_yoga

Uno de mis profesores me dijo una vez, hay tantos tipos de yoga como instructores y practicantes en el mundo. La práctica de asanas (posturas) es siempre única y personal, por eso es importante encontrar el estilo que se ajuste a tu personalidad o incluso etapa de vida en la que estés.

¿En qué consiste este tipo de Yoga?

Yoga Vinyasa es una práctica física en la cual tu cuerpo se mueve en armonía con tu respiración. No hay reglas ni estructuras que seguir, simplemente se busca fluir a través de movimientos progresivos. En cada inhalación buscamos expandir, estirar y abrir el cuerpo, y en cada exhalación buscamos cerrar, comprimir o torsionar el cuerpo. Desde lo más sutil hasta lo más evidente, nuestra respiración siempre nos ayudará a conectar con nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestro espíritu.

Lo que más me gusta de Vinyasa es que todas las clases son una sorpresa. Hay una infinidad de posibles secuencias, objetivos y ritmos que puedes darle a una clase. Y esto mismo te lleva a conocerte en formas que difícilmente lo harías fuera del mat.

¿Cuál es su origen?

Yoga como tal, va mucho más allá de las posturas físicas - asanas - que se nos viene a la mente cuando hablamos de esta práctica. De hecho, según los Yoga Sutra de Patanjali escritos hace alrededor de dos mil años, Asanas (posturas) es solo una de ocho partes que componen la totalidad del Yoga.
Su historia es tan antigua y compleja que es difícil determinar un momento o creador exacto en el tiempo. Pero fue Rishi Swatmarama, en el siglo XV, quien habló por primera vez de Yoga Hatha como práctica enfocada en el cuerpo. Y luego, desde las enseñanzas de Krishnamacharya es que van surgiendo los estilos modernos que hoy conocemos; desde Ashtanga, Iyengar,Vinyasa, Bikram, Kundalini hasta Aeroyoga, Acroyoga, Yin yoga, Power yoga, y tantos más.

¿Cómo fue que comenzaste a practicarlo?

Mi primer acercamiento al yoga fue en las clases de un gimnasio, alrededor del 2009. Sin tener ni una noción de esta práctica, solo pude concluir que no era para mi. Probablemente habían muchos alumnos como para que la profesora se pudiera dar cuenta de que yo era hiperlaxa y que, por lo tanto, necesitaba ajustes específicos a mi cuerpo. Así que solo sentí dolor y frustración.
Una operación del tobillo me dejó sin poder hacer ningún deporte con impacto por muchos años, y fue ahí cuando decidí darle otra oportunidad al Yoga, casi por descarte. Algo hizo click en mi esa vez, y desde el 2015 que ha sido parte fundamental de mi vida.

Hatha me enseñó por años las fundaciones del Yoga, luego Iyengar me acompañó en una etapa de mi vida en la que lo que necesitaba era estructura, alineación y algo de rigidez. Ahí hice mi primer instructorado el 2018 y me lancé a dar clases. Pero no fue hasta que descubrí Yoga Vinyasa, en mi segunda formación, que esta práctica realmente me transformó, como alumna y como instructora.

Si pudieras decirnos 5 beneficios que este tipo de yoga ha traído a tu vida, ¿cuáles serían?

  • Autoconocimiento: para mí, Yoga Asanas es en realidad una metáfora. Lo que sucede dentro del mat es un espejo de lo que sucede fuera, en nuestras vidas. Así, a través de algo tangible y físico, podemos conectar con nuestras emociones y actitudes para poder desarrollarnos mejor como personas
  • Reducción de estrés: Solo el hecho de hacer una pausa en tu rutina y en tus exigencias del día a día para poder respirar, conectar con tu cuerpo y dejarte llevar por movimientos fluidos hace que tu actitud cambie y que tu mente se calme
  • Mejorar tu estado físico: no solo mejora nuestra flexibilidad pero también fortalecemos nuestra musculatura y expandimos nuestros rangos de movimiento. Permitiéndonos tener una vida más sana, mejorar nuestra postura y rendimiento en otros deportes
  • Mejora tu autoestima: lograr algo que te propusiste, no tiene precio. En Yoga vas teniendo nuevos objetivos todo el tiempo, e ir viendo como TU constancia y TU esfuerzo en la práctica dan frutos, te hacen sentir invencible
  • Desapego a las expectativas, Nunca dejarás de ser un aprendiz en yoga. Lo importante es dejar las expectativas siempre como un juego. No importa si no puedes hacer paros de cabeza o si te cuestan los balances de mano, sigue practicando y todo hará sentido

¿Es este tipo apto para todas las personas?

En mi experiencia personal, Yoga Vinyasa es el estilo más amigable y flexible para todos los tipos de cuerpo y para todos los niveles. No importa si tienes alguna limitación física, si no estás en tu mejor estado físico, no importa tu edad ni tu ocupación. Esta práctica, naturalmente, se va a adaptar a ti, a tus capacidades y a tus limitaciones.

Cada cuerpo es distinto. Anatómicamente, tenemos diferentes rangos de movilidad, diferente estructura ósea y tejidos musculares. Por esto es que en Vinyasa debemos siempre buscar que la postura se ajuste a nuestro cuerpo, y no que nuestro cuerpo se ajuste a una postura. Porque hay ciertos movimientos y posiciones que simplemente no son para nosotros. Esta fue una de las mayores lecciones que Yoga Vinyasa me entregó y que me ha permitido disfrutar del Yoga de diferentes formas en diferentes momentos de mi vida.

¿Tips y Recomendaciones?

Dicen por ahí que para gustos, colores. Hay tantos tipos de yoga, tantos instructores, tantos estilos, tantos centros, tantas clases online; que la gran invitación está en que explores cuál de todas te hará sentir calma, felicidad y gratitud. Y si no sientes ninguna de esas tres cosas, por ahí, NO es.

Pero tampoco dejes que una primera mala experiencia arruine tu relación con el yoga! Porque cerrarse a esta experiencia antes de realmente vivirla, es como decir que no te gusta la naturaleza sólo porque no te gustan las arañas. Hay todo un mundo por descubrir allá afuera, que te llevará finalmente a descubrir aquél que tienes dentro. Y eso es lo lindo del yoga.

03 junio 2022 — Casa Siete

Dejar un comentario